Señor Director:

En el discurso de los candidatos presidenciales cada vez se hace más notorio un punto ciego respecto de la forma de organización de los ciudadanos. Antes que en “clases sociales”, las personas se organizan cada vez más en torno a intereses comunes para aportar al desarrollo social a nivel local (juntas de vecinos, bomberos) o a nivel general (fundaciones). El estudio Sociedad en Acción del Centro de Políticas Públicas UC y Fundación Chile+Hoy, recién publicado, viene a suplir las brechas de información respecto de la sociedad civil, mostrando que en una década se ha duplicado la cantidad de organizaciones sociales (234 mil), convirtiéndose en un sector que representa el 1,4% del PIB y genera más de 137 mil empleos remunerados.

La sociedad civil requiere de una nueva visión de parte del Estado, que comprenda todo su valor y evite su captura. En este sentido, adquiere urgencia un sistema de donaciones más simple e inclusivo para todo tipo de donantes, especialmente para personas individuales, con el fin de que tanto el sector público como el privado aporten al desarrollo de un sector que facilita el encuentro común y fortalece la democracia.

Publicado en El Mercurio.